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Testimonios

Amanda Todd

15 años, Canadá.

 

Uno de los casos más sonados fue el de Amanda, una joven canadiense de 15 años que tras largos años de ciberacoso, grooming y ciberbullying decidió terminar con su vida. 

Este, como muchos otros casos, coloca el tema de educación de Competencias Digitales en los Nativos Digitales y exige una legislación a la altura de los tiempos de la era digital.

 

La historia comenzó cuando ella tenía 12 años y comenzó a conocer gente en la red. Allí contactó con un “chico” (un pedófilo con identidad falsa) con el que comenzó a flirtear y terminó por mostrarse en topless vía Webcam, siendo grabada por el abusador. Desde ese momento Amanda no pudo vivir tranquila. Las mentiras y el engaño de su ciberacosador dieron paso del grooming al ciberbullying vía Facebook y al bullying en la nueva escuela.

 

El ciberacosador la amenazó con difundir la imagen si ella no aceptaba mostrarse semidesnuda nuevamente. La joven no accedió y el sujeto cumplió su amenaza: la fotografía con el torso descubierto de Amanda fue enviada a todos sus amigos, conocidos, profesores, etc.

A pesar de que la chica se cambió de escuela en incontables ocasiones, el acosador se encargaba de mandar la imagen a todos quienes estaban cerca de Amanda, además creaba perfiles falsos en Facebook con su fotografía como foto principal, logrando así trasladar el ciberbullying  a la vida cotidiana en forma de bullying, llegando incluso a sufrir palizas de otros compañeros.

Después de un intento de suicidio, siguió víctima de burlas y ciberbullying. Toda esta lamentable situación generó una dura situación para la joven, terminando finalmente en suicidio.

R.A.

Padre de víctima de ciberbullying, España.

 

Este padre anónimo ha compartido su experiencia, su hija de 13 años fue víctima de ciberbullying. Por suerte para él y su familia, la historia terminó con final feliz y solución legal.

 

La historia comienza por un grupo de Whatsapp, en un principio todo ocurre con total normalidad: las amigas tienen un grupo a través del cuál se cuentan sus cosas, etc. Pero un día, "la matona del grupo" como él la define, empieza a meterse con su hija. Esto deriva en las burlas del resto, la niña abandona el grupo pero el acoso sigue por lo privado, es más, se extiende a toda la clase.

Todos le dan de lado de forma cruel y sin ningún tipo de reparo. El ciberbulling se convierte en bullying, con agresiones físicas.

 

Este padre pide responsabilidades a los demás padres, pero ninguno da la cara. Recurre a la Guardia Civil y le dicen que no pueden hacer nada porque son menores.

Entonces recuerda un artículo que había leído acerca de los chats, donde se comentaba el ejemplo de que si estas chateando con Claudia Schiffer nadie te garantiza que no estás chateando con su perro y que lo único que está claro es que se habla desde la IP de Claudia Schiffer.

 

Así cae en la cuenta de que estos niños, al ser menores, legalmente no estaban en posesión de sus teléfonos móviles. Entonces surgió la gran pregunta: ¿cómo puedes asegurar que la amenaza la ha hecho un niño? ¿y si fuera el padre?

Basándose en esta idea, su abogado puso la denuncia como amenazas desde un número de teléfono, no directamente a una persona para que fuese la Guardia Civil quien identificase al dueño y éste al autor.

Con lo cual se dejaba al padre de los otros niños en la situación de que si no identificaba a su hijo delante del juez, cargaría con la culpa, y si lo identificaba, quedaría como un cobarde delante de su hijo.

 

Cuando la Guardia Civil llevó a declarar a esos padres ante el juez, las amenazas cesaron, los mensajes cesaron e incluso algunos padres y niños les pidieron perdón.

Caso de grooming

2009, Chile.

 

Una de las detenciones que alcanzó mayor notoriedad en Chile fue la de un sujeto de 26 años que realizó grooming a una niña de 13, creando dos identidades falsas: Carlita (con quien empezó el contacto) y Pedrito (que se convirtió en su novio virtual).

 

El sujeto, usando información conseguida mediante engaños, consiguió que la niña le diera su clave de Messenger. Con esta clave y mediante amenazas, logró que la menor le diera detalles del lugar donde vivía, de sus padres, etc., y posteriormente que le enviase fotos, primero en ropa interior y luego desnuda.

Finalmente, al ver que no podía controlar la situación, la niña le contó todo a su madre quien realizó la pertinente denuncia que culminó con la detención del groomer.

Aunque el grooming aún no estaba considerado delito en Chile, el sujeto fue acusado de corrupción de menores y producción de material pornográfico infantil.

En la defensa de este ante el juez, señaló que no era un pedófilo, sino que todo era una venganza por las ofensas que la madre de la menor le había hecho al padre fallecido del groomer.

Laura

13 años, México.

 

Laura era una adolescente mexicana que por medio de internet conoció a un chico.

Tras conversar en varias ocasiones a través de las redes sociales, este chico la invitó a salir. Laura se resistió pero él fue insistente hasta que logró ganarse su confianza y despertó el interés de la chica por conocerlo. Cuando por fin accedió, Laura fue secuestrada y sufrió toda clase de maltratos. Su amigo de Internet la obligó a prostituirse hasta que fue rescatada.

Ahora comparte su caso en foros para prevenir a las adolescentes que, como ella, creen que pueden encontrar amigos o al hombre de sus sueños a través de Internet.

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